Europa o la traición de unos valores.




Lo primero condenar firmemente los atentados cometidos en Abidjan (Costa de Marfíl) y Ankara (Turquía), aunque cueste creerlo a tenor de los medios, los atentados no solo ocurren en París. Además, me gustaría agradeceros el apoyo en el concurso 20 Blogs, del 8º puesto he pasado al 5º puesto lo que supone todo un éxito teniendo en cuenta el nivel de los rivales. Ahora solo queda esperar al 1 de Abril para conocer el veredicto definitivo del Jurado. Valoro la experiencia como algo muy positivo porque me ha motivado a la hora de introducir mejoras en el blog, tanto a nivel de plantilla y diseño como a nivel de comunicación con una página Facebook que ya ha superado los 100 likes en tan solo dos semanas. Por otro lado, deciros que me marcho a Senegal unos días en Semana Santa con un amigo, también becario ICEX, que viene desde Costa de Marfil por lo que espero informaros de esta experiencia a la vuelta dedicándole una entrada. 

Lo que hoy me gustaría compartir con vosotros es una entrada sobre los últimos acontecimientos que sacuden la actualidad internacional y que a mi por lo menos me están haciendo replantearme bastantes cosas. Me refiero obviamente a la situación tan delicada por la que está atravesando Europa con la llegada masiva de refugiados y la respuesta tan decepcionante que estamos ofreciendo al resto del Mundo. Digo esto porque no puedo evitar, al igual que muchos de vosotros imagino, sentirme en cierta medida co-rresponsable ante la imagen ofrecida al exterior.

Sin embargo los datos oficiales sugieren que en España las preocupaciones siguen siendo otras. La semana pasada la última encuesta del CIS sobre las mayores preocupaciones de los españoles indicaban que la dramática situación de los refugiados es objeto de preocupación del 0% de la población, lo que hace pensar que seguimos bajo los efectos de la "anestesia general" en este aspecto. Sin embargo, la invisibilidad de este fenómeno puede resultar comprensible en cierta medida cuando se observa que los principales receptores de refugiados no son los países europeos sino los países limítrofes cuya capacidad de acogida es bastante limitada.Esto no ha sido un impedimento para que Europa se haya replegado en sí misma ante el temor de la invasión de "sin papeles". El paso atrás de Merkel, unido a actuaciones de socios de la UE como la Hungría de Orban que rechaza la cuota asignada o Dinamarca que multa a los que acogen a refugiados en domicilio, muestran una  tendencia preocupante. Todo ello recuerda a lo ocurrido en la década de los años 30 del siglo pasado cuando el miedo al extranjero y el excesivo proteccionismo provocaron el cierre de fronteras y el auge del radicalismo con las consecuencias que todos conocemos.  

Con todo, no es momento de caer en el relativismo moral de cuestionar los valores occidentales. El motivo por el que los refugiados se dirigen a países europeos y no a sus vecinos musulmanes es sencillo. En Europa se les acoge y se les protege tanto humana como legalmente. Huir de la guerra es trágico y Europa es el único continente que les garantiza derechos y oportunidades para salir adelante. En mucho de los países del Golfo, los inmigrantes no gozan de los derechos más fundamentales como el acceso a la vivienda y muchos, procedentes del Sudeste Asiático, en su mayoría, viven en condiciones cercanas a la esclavitud. No debemos olvidar que ni en Arabia Saudí, Qatar o UAE entre otros existe Estatuto al refugiado dado que estos países no han suscrito la Convención de Ginebra de 1951 que indica la obligación de los Estos firmantes de garantizar:

"la protección que un Estado ofrece a personas que no son nacionales suyos y cuya vida o libertad están en peligro por actos, amenazas y persecuciones de las autoridades de otro Estado".

Lo que está ocurriendo hasta ahora rompe, no obstante, con uno de los principios más básicos de la construcción europea: el de la solidaridad, ello está llevando a los Estados más débiles a asumir la mayor carga demográfica. Es el caso de Grecia, muy castigada por la crisis o países limítrofes como Serbia y Macedonia incapaces de gestionar la llegada masiva de refugiados en su frontera. España, como aparente espectadora pasiva de esta realidad no debería olvidar su contexto geopolítico. La tranquilidad del Mediterráneo pasa en gran parte por la relación con nuestro vecino del sur: Marruecos, de cuya estabilidad depende en estos momentos gran parte del futuro del Mundo árabe. No olvidemos que es el único de los países del Magreb junto a Argelia que se ha mantenido casi al margen de la "primavera Árabe". Por ello, sería necesario que España se reafirmase con una posición abierta y decidida creando un escenario de dialogo sin perder de vista su pertenencia a Europa. No hay duda de que España le debe mucho a Europa, desde su adhesión a la UE en 1986 y es en los momentos de dificultad cuando corresponde devolver los favores obtenidos.  

Hace tan solo tres años, hablaba en una entrada de este blog sobre si la UE era o no un modelo a imitar, y que lo que nos distinguía de otras civilizaciones eran precisamente unos valores irrenunciables. Europa podría pasar por todo tipo de penurias. como ocurrió en las Guerras Mundiales, pero al menos al mirarse al espejo tendría la conciencia tranquila de haberse mantenido fiel a unos valores que le han hecho evolucionar durante siglos: la tolerancia, el respeto a las minorías, la libertad de conciencia o la solidaridad. Hoy tan solo cuatro años después, el legado en esta materia es algo difuso.Ver la respuesta tibia y basada en el pragmatismo más cínico como se ha visto con el reciente acuerdo con Turquía, permite llegar a una conclusión demoledora: "Europa no solo se ha empequeñecido en lo económico sino lo que es más grave, se ha empequeñecido en la esencia de su ADN existencial y las consecuencias de ello son imprevisibles". No es el momento de lamentarse, las consecuencias de nuestros actos quedarán grabadas en la historia. 


Siempre pensé que Europa se haría entre crisis y que sería la suma de las soluciones que diéramos a esas crisis”. (Jean Monnet)

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